Los que trabajamos en ámbitos de trabajo donde el cambio es una constante, -como sucede por ejemplo en Consultoría, estamos acostumbrados a ello, ya que lo vivimos muy a menudo, pero ¿realmente somos conscientes de la importancia de amortiguar los cambios?
Todo el mundo sabe desde la época de Darwin aquello de «No es el más inteligente ni el más fuerte el que sobrevive, sino el que mejor se adapta a los cambios». Pero es en estos momentos, como el contexto actual, donde debemos pasar de la palabra a la acción, porque no sólo se trata de adaptarse al cambio, sino de salir favorecidos. A esta capacidad se le llama resiliencia y ¿queréis una buena noticia?Se puede desarrollar y te vamos a explicar cómo.
5 tips para ser un gran superviviente a los cambios y, además, salir favorecidos
- Entender que el cambio es una oportunidad de aprendizaje. Siempre que salimos de la zona de confort aprendemos algo. Hay veces que es algo bueno y que hemos buscado nosotros, pero hay otras que no. Incluso cuando el cambio no lo he buscado yo y tiene connotaciones negativas, siempre aprendemos algo. Al final del proceso de adaptación, es importante pararse a pensar, reflexionar sobre cómo hemos afrontado la situación y analizar qué estrategias nos han servido y cuáles no.
- Tomar una actitud de acción. Hay que vencer cómo sea la resistencia a cambiar. Lo primero que tenemos que aceptar es que los cambios vienen, los elijamos o no (esto va por ti, Covid-19). Cuanto menos tardemos en aceptarlo, más pronto empezaremos a trabajar en nuestro plan de acción. ¡Ser proactivo debe ser nuestro must!
- Si tienes que pedir ayuda, hazlo. Hay veces que las situaciones nos sobrepasan, y no pasa nada, no tenemos por qué poder con todo. El primer paso es darse cuenta; y el segundo, buscar apoyo, seguro que hay mucha gente dispuesta a echarnos una mano. Es importante en estos casos, primero centrarnos en buscar un equilibrio a nivel emocional y cuando tengamos a nuestras emociones bajo control, ponernos a trabajar en nuestro plan de acción.
- Haz un buen análisis de la situación. Hay veces que los nervios o la incertidumbre se apoderan de nosotros y no hacemos un balance correcto de lo que está pasando. Evitemos el catastrofismo y busquemos opiniones de las personas que nos rodean para ser lo más objetivos posibles. Un buen análisis es clave para empezar un buen plan de acción.
- Confía, confía y vuelve a confiar en ti. Es fundamental tener una autoestima fuerte y estar seguros de nuestras fortalezas para enfrentarnos a la situación. Para ayudarnos a ello, podemos hacer una lista con lo que más nos gusta de nosotros mismos, de qué estamos orgullosos y cuáles han sido nuestros logros (aunque sean pequeños, ¡esos también cuentan!).
Si a todo esto le añadimos una actitud positiva… que se preparen los cambios, que ¡allá vamos!
Pingback: Activar el modo happy estas navidades, ¿es posible? – Tu centro de expertise en España sobre Digital Assurance y Testing
Pingback: Vuelta a la ‘nueva normalidad’, pero ¿sabes cómo gestionarlo? – Tu centro de expertise en España sobre Digital Assurance y Testing